Atrévete a tener coraje. Muchas veces cuando emprendemos cosas nuevas como un trabajo nuevo, un estudio nuevo o una relación tendemos a sentir miedo por si no sale bien.
En realidad ese miedo no hay que entenderlo como tal ya que sólo es el empujón que nos lleva al coraje. Coraje es el valor y el esfuerzo que ponemos en las cosas que queremos hacer.
Siempre que cambiamos nuestra rutina o nuestros hábitos sentimos miedo. Pero no es más que el comienzo de una decisión que hemos tomado porque la vemos necesaria.
Crecer como persona supone realizar cosas nuevas, salir de nuestra zona de confort y arriesgar, para ello no hay que pasar miedo simplemente decirnos a nosotros mismos que es coraje:
“Yo tengo coraje de hacer cosas nuevas”.
Todos tenemos coraje ya que todos tenemos cosas nuevas que queremos hacer y otras en cambio son cosas que no tenemos más remedio que hacerlas.
Para estas últimas también debemos aplicar nuestro coraje interno, no mirarlo como miedo sino como coraje.
El miedo a los cambios se ve reducido si pensamos que lo que sentimos es coraje, valor y esfuerzo para alcanzar nuestras metas.
También es cierto que hay que buscarnos primero metas pequeñas, luego medianas y luego grandes. Si empezáramos por metas grandes y no por las más accesibles, nos desmoralizaríamos y no avanzaríamos.
Por ejemplo, querer crear una empresa nueva sin haber estudiado el mercado previamente es fracasar de antemano.
Si lo que quieres es montar un negocio, mira los que ya existen iguales o parecidos al tuyo, que clase de gente lo utiliza y si puedes mejorarlo.
Con las relaciones pasa lo mismo, no puedes estar pensando en irte corriendo a vivir con una persona o incluso casarte si no conoces lo suficiente sobre él o ella.
Las relaciones son un entendimiento sin palabras, una parte y otra deben adaptarse sin perder su identidad.
En todos estos casos se puede aplicar el dicho de “no empieces nunca la casa por el tejado”, si no hacemos con cabeza nuestros proyectos tenderemos a pasar más miedo por el fracaso y por tanto el coraje desaparecerá.
No hay que entrar al trapo del miedo, agarra tu sueño, empieza a visualizarlo y cuando lo tengas claro prepárate, no con miedo y ansiedad, sólo con coraje.
Es importante en todo que tengas confianza en ti mismo, puedes hacer lo que te propongas porque para conseguir las cosas que queremos siempre hay que trabajar muy duro.
El coraje es un motor que te puede ayudar a superar muchos obstáculos que encuentres en el camino.
El valor es algo que también se trabaja, tengo valor para decir lo que pienso y tengo valor para trabajar por mis sueños.
Nunca dejes que nadie te diga que no puedes, probablemente esa persona no tiene tu coraje para emprender sus propios sueños e intentará tirar por tierra los tuyos.
Mucho ánimo y mucho coraje en tú nuevo proyecto. Todos tenemos algo que aportar y en tu mano está dar lo mejor de ti.
Autora: Miriam de Juana Ortín
WebSite: https://www.facebook.com/MiriamDeJuanaOrtin
¡Qué lindas palabras! ¡Gracias, me sirvió mucho leerlo!