Te damos la bienvenida al Día 2 de este Tratamiento Metafísico para la Salud. ¡Deseamos que lo disfrutes a pleno!
Introducción: Decretos y Afirmaciones Positivas
Se recomienda leer en voz alta entre 1 a 3 veces por día. Los horarios sugeridos para decretar son (por orden de mayor a menor importancia):
- A la mañana, luego de despertarnos.
- A la noche, antes de dormir.
- A la tarde, antes de tomar una siesta.
Al decretar, es importante emular el mayor sentimiento positivo posible. A mayor vibración emocional, mayor poder de atracción.
Puedes potenciar el ejercicio ubicando un espejo frente a ti y repitiendo los decretos mirándote a los ojos.
¡Yo (mi nombre y apellido) gozo de Excelente Salud y Soy Feliz!
¡Disfruto de una Salud Perfecta y vivo en constante Bienestar!
¡Creo Paz en mi Espíritu, Claridad en mi Mente y Salud en mi Cuerpo!
¡La Salud Perfecta es el estado natural de mi Ser!
¡Estoy rodeado de personas Saludables y Felices!
¡Estoy Feliz y Sano! ¡Vivo Feliz y plenamente!
¡La Vida sólo me pide Ser Feliz! Por eso…
¡Soy Muy Feliz, Aquí y Ahora!
¡Gracias, gracias, gracias!
Lecturas del Día
En este Día 2 del Tratamiento Metafísico para la Salud hablaremos de la relación entre el perdón y la enfermedad, y también del poder sanador de la risa. ¡Que lo disfrutes!
Toda enfermedad proviene de no haber perdonado algo
Cada vez que enfermamos, debemos buscar en nuestro corazón qué es lo que necesitamos perdonar.
En A Course in Miracles (Un curso en milagros) se nos dice que “Toda enfermedad proviene de no haber perdonado algo”, y que “Cada vez que enfermamos, debemos mirar a nuestro alrededor para ver a quién tenemos que perdonar.”
A esta idea añadimos que la persona a quien más difícil se nos hace perdonar es aquella misma de quien más necesitamos liberarnos.
Perdonar significa renunciar, dejar en libertad. No tiene nada que ver con ningún comportamiento externo; es simplemente no seguir aferrado a algo.
No es necesario que sepamos cómo perdonar; lo único que hace falta es que estemos dispuestos a hacerlo, que de los cómos ya se encargará el Universo.
Aunque entendemos tan bien nuestro dolor, ¡qué duro nos resulta a casi todos entender que ellos, sean quienes fueren esos que más necesitamos perdonar, también sufrían!
Es necesario que entendamos que estaban haciendo lo mejor que podían con la comprensión, la conciencia y el conocimiento que tenían en aquel momento.
Cuando tienes un problema, no importa de qué se trata; ya sea mala salud, falta de dinero, relaciones insatisfactorias o una creatividad sofocada, siempre se trabaja sobre una sola cosa, que es el amor a sí mismo.
Cuando realmente nos amamos, es decir, cuando nos aceptamos y aprobamos exactamente tal como somos, todo funciona bien en la vida.
Es como si por todas partes se produjeran pequeños milagros.
Nuestra salud mejora, atraemos hacia nosotros más dinero, nuestras relaciones se vuelven más satisfactorias, y empezamos a expresarnos de manera más creativa.
Y parece que todo eso sucediera sin que lo intentásemos siquiera.
Si uno se ama y se aprueba a sí misino, creándose un espacio mental de seguridad, confianza, mérito y aceptación, eso aumentará su organización mental, creará más relaciones de amor en su vida, le traerá un trabajo nuevo y un lugar nuevo y mejor donde vivir; incluso le permitirá normalizar su peso corporal.
Las personas que se aman a sí mismas, y que aman su cuerpo, no abusan de sí mismas ni de los demás.
Aprobarse y aceptarse a sí mismo en el ahora es el primer paso hacia un cambio positivo en todos los ámbitos de la vida.
El amor a nosotros mismos, comienza por no criticarnos jamás por nada. La crítica nos inmoviliza en la pauta misma que estamos intentando cambiar; entendernos y ser amables con nosotros mismos nos ayuda a salir de ella.
Recuerda los años que te has pasado criticándote sin resultado alguno. Haz la experiencia: apruébate, y observa qué es lo que sucede.
La Risa es la mejor Medicina
La Historia de Cathy Goodman
Me diagnosticaron cáncer de mama. Realmente creí con todo mi corazón, con toda mi fe, que ya me había curado. Cada día decía: «Gracias por mi curación». Esto lo repetía continuamente. «Gracias por mi curación». Estaba convencida de que me había curado. Me veía como si el cáncer nunca hubiera invadido mi cuerpo.
Una de las cosas que hice para sanarme fue ver películas cómicas. Todo lo que hacíamos era reír y reír. No podía permitirme ningún estrés en mi vida porque sabía que ésa era una de las peores cosas que te pueden pasar mientras estás intentando curarte.
Desde el diagnóstico hasta la curación transcurrieron aproximadamente tres meses. No me sometí ni a quimioterapia ni a radiación.
Esta hermosa e inspiradora historia de Cathy Goodman demuestra los tres grandes poderes en acción:
El poder de la gratitud para sanar, el poder de la fe para recibir y el poder de la risa y la felicidad para disolver la enfermedad en nuestro cuerpo.
Cathy tuvo la inspiración de usar la risa en su sanación, tras conocer la historia de Norman Cousins. A Norman le habían diagnosticado una enfermedad «incurable». Los médicos le habían dicho que sólo le quedaban unos meses de vida.
Norman decidió curarse a sí mismo. Durante tres meses se dedicó a ver todas las películas cómicas que pudo y a reírse sin parar.
La enfermedad desapareció en tres meses y los médicos dijeron que su recuperación había sido un milagro.
Al reír, Norman liberó toda la negatividad y también su enfermedad. Sin duda, la risa es la mejor medicina.
Todos venimos con un programa básico. Se denomina «autosanación». Te haces una herida y se cierra. Tienes una infección bacteriana y el sistema inmunitario se pone en marcha para combatir esas bacterias y te cura. El sistema inmunitario está diseñado para proteger al cuerpo.
La enfermedad no puede subsistir en un cuerpo que se encuentra en un estado emocional saludable.
Nuestro cuerpo está eliminando millones de células cada segundo y también crea millones de células al mismo tiempo.
De hecho, hay partes de tu cuerpo que cada día son sustituidas. Otras partes tardan meses, otras tardan años. Pero al cabo de unos pocos años todos tenemos un cuerpo totalmente nuevo.
Si todo nuestro cuerpo se renueva cada cierto tiempo, tal como ha demostrado la ciencia, ¿cómo puede una enfermedad o un proceso degenerativo habitar en nuestro cuerpo durante años?
Sólo puede retenerlo el pensamiento, la observación de la enfermedad y la atención que se le concede a la misma.

Ejercicios
En los ejercicios del Día 2 del Tratamiento Metafísico para la Salud pondremos en práctica el perdón y la risa en post de mejorar tu salud.
1. Realiza este sencillo ejercicio para Perdonar:
- Toma papel y lapicera, y ubícate en un espacio tranquilo donde no hayan interrupciones. Puedes encender una vela, incienso y/o poner música relajante si así lo consideras.
- Cierra tus ojos. Piensa acerca de qué o quién eliges perdonar. Ten en cuenta que el perdón puede ser a tú mismo. Puede ser que esto te lleve a algún recuerdo que a lo mejor creías ya olvidado y/o perdonado.
- Abre tus ojos y escribe todo lo que se te venga a la mente, no filtres nada: lo piensas y lo escribes. Saca todo lo que sientes y permite que realmente sea perdonado. Perdona y suéltalo, déjalo ir, llora si es necesario. Agradece porque puedes y elijes perdonar para seguir adelante.
- Al finalizar de escribir, léelo en voz alta o mentalmente. Luego, rompe o quema el papel.
- Arroja los restos al viento, en el retrete o bien entiérralos, mientras repites: “Me perdono y perdono. Suelto y me libero. Me amo, me acepto y me apruebo tal como soy. Permito que llegue a mí todo lo maravilloso que me merezco. Así es. Gracias, gracias, gracias.”
2. ¡Llegó el momento de reírnos!
Haz una lista de películas, series, espectáculos, videos, audios, personas, juegos, actividades, etc. que despierten la alegría y el humor en ti, y proponte durante todo este mes dedicarte al menos un par de horas al día a llenarte de felicidad. ¡Llena tu cuerpo de endorfinas!
Cierre: Tratamiento de Sanación Interior
Relee este tratamiento varias veces por día.
En la infinitud de la vida, donde estoy, todo es perfecto, completo y entero.
Creo en un Poder mucho mayor que yo, que fluye a través de mí en cada momento del día.
Porque sé que en este Universo hay solamente Una Inteligencia, me abro a la sabiduría interior.
De esta Única Inteligencia provienen todas las respuestas, toda curación, todas las soluciones, toda creación nueva.
En ese Poder y esa Inteligencia confío, sabiendo que todo lo que necesito saber se me revela y que todo lo que necesito me llega en el momento, el lugar y el orden adecuados.
Todo está bien en mi mundo.