En esta sexta clase del Taller de Autoestima hablaremos sobre la Comprensión de uno mismo. ¡Esperamos de corazón que la disfrutes y te sea de mucha utilidad!
La esencia de la autoestima es la comprensión contigo mismo. Cuando te comprendes, te comprendes y te aceptas.
Si cometes un error, te perdonas. Tienes expectativas razonables de ti mismo. Estableces objetivos alcanzables.
Tiendes a verte como básicamente bueno. Tu crítica patológica no puede soportar que te comprendas.
Cuando aprendes a comprenderte, comienzas a revelar tu sentido de valor.
En verdad, la comprensión es una habilidad, una habilidad que puedes adquirir si no la tienes o mejorar si la tienes ya.
La habilidad de la comprensión tiene tres componentes básicos: comprensión, aceptación y perdón.
¿Qué es la autocomprensión?
La autocomprensión como eje del proceso investigativo, sitúa al individuo como responsable de su propio desarrollo y gestor de nuevas realidades y visiones de mundo.
Por consiguiente, esta investigación, se relaciona directamente con el tema que dirige la especialización referente al Desarrollo humano.
¿Cómo se desarrolla la autocomprensión en el niño?
En la niñez temprana, los niños desarrollan un yo ideal; es decir, un concepto de lo que les gustaría ser, y tienen problemas para reconocer que su yo real es diferente de su yo ideal.
Por este motivo, los niños de esta edad se definen como un modelo de habilidades y virtudes.
Ejercicio: Hacia Una Mente Compasiva
Para desarrollar una mente comprensiva, debes hacer un compromiso por una forma diferente de pensar.
La vieja forma era juzgar y luego rechazar. La nueva forma requiere que suspendas el juicio por unos momentos.
Cuando te enfrentes a una situación que evalúas tradicionalmente de forma negativa (“Es estúpida… Me contraje otra vez… Es un egoísta… Soy un incompetente…”).
En vez de ello puedes utilizar una serie de pensamientos que son la respuesta compasiva. Describe en tu diario personal tres situaciones en las que a menudo te rechazas y tres respuestas compasivas.